Nuevas Directrices Dan Luz Verde a los Suplementos de Calcio
La ingesta de calcio, a través de alimentos o suplementos, no es relevante en el riesgo cardiovascular de adultos sanos, según expertos apoyados por la Fundación Nacional norteamericana de la Osteoporosis y la Sociedad Americana de Cardiología Preventiva. Siempre y cuando los sujetos con excedan los 2.000-2.500 mg/día, el calcio “debería considerarse seguro” desde este punto de vista, aseguran.
Esa conclusión, basada en una revisión de la evidencia realizada por investigadores de la Universidad de Tufts (Boston, MA) y RAND Corporation (Santa Monica, California) es el principal mensaje de una nueva directriz clínica publicada por los dos grupos sin ánimo de lucro. Tanto las recomendaciones como la revisión se publicaron en Internet a principios de esta semana en Annals of Internal Medicine.
Al ser preguntado sobre cómo casan estas conclusiones con el riesgo CV que acompaña a la ingesta de calcio, el coautor de las directrices, Dr. Taylor C. Wallace (Universidad George Mason, Fairfax, VA) dijo a TCTMD: “Ahí hay mucha desinformación.”
“Hay un extenso cuerpo de evidencias…que vienen a confirmar la seguridad del calcio en el sistema cardiovascular, dijo Taylor, que publicó sus opiniones en Internet reciente. “Incluso en niveles por encima del nivel superior tolerable de ingesta fijado por la Academia Nacional de las Ciencias no se observa ningún efecto adverso.” Aunque ha habido algunos estudios que sugieren riesgo, muchos se realizaron hace décadas cuando los hábitos de vida eran distintos, dijo. Los estudios observacionales tienen limitaciones inherentes y parte de las evidencias se deben a ensayos aleatorizados diseñados, originariamente, para poner a prueba otras hipótesis y puntos finales.
“Así que hemos de preguntarnos, en nutrición, ¿es cierto este pequeño aumento del riesgo o hay algún factor de confusión? Creo que en muchos de estos estudios poblacionales, podrían controlar los seis factores de riesgo más importantes de sufrir enfermedad cardiovascular, pero hay más de 200 estudios que, sabemos, no hacen un control de esto. Por eso me tomaría estos datos muy a la ligera,” subrayó Wallace. “Nuestros datos compilan todos los estudios poblacionales, todas las investigaciones clínicas. El resultado de cada uno de estos cuerpos de datos revela, sin lugar a dudas, que los suplementos de calcio son, extremadamente, seguros y no benefician ni perjudican al sistema cardiovascular.”
Una cosa está clara, dijo Wallace, y es que “el calcio es esencial para los huesos.” Con el consumo de productos lácteos en declive, quizá la gente no esté recibiendo la cantidad necesaria de calcio en la dieta. “Es un verdadero problema de salud pública, sobre todo en mujeres postmenopáusicas. Como las mujeres están empezando a no tomar sus suplementos de calcio ni a consumir tres raciones de productos lácteos al día, están corriendo un mayor riesgo de fracturas.”
Al ser preguntado por la solidez de las evidencias a este respecto, dijo, los suplementos de calcio “probablemente sean una de las intervenciones nutricionales más sólidas que tenemos a día de hoy.”
¿Por qué Arriesgarse?
La Dra. Erin D. Michos (Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, Baltimore, MD), no obstante, describió la evidencia de las fracturas como “no muy clara.”
¿Por qué confiar en incertidumbres, en cuestiones de seguridad, preguntó, cuando no tenemos beneficios claros derivados de los suplementos de calcio? A principios de este mes, en el Journal of the American Heart Association, Michos y sus colegas publicaron un análisis basado en datos observacionales extraídos del Estudio Multi-Étnico de la Aterosclerosis que reveló que los adultos sin enfermedad cardiovascular que tomaban suplementos eran un 22% más propensos a desarrollar aterosclerosis al cabo de 10 años.
Comentando los artículos aparecidos en Annals para TCTMD, dijo que “lo único que es, verdaderamente, consistente es que tanto este meta análisis…como nuestro reciente estudio siguen confirmando la ausencia de daño cardiovascular derivado, sólo, del calcio en la dieta.” Esto debería de “tranquilizar,” dijo, a los sujetos que reciben sus dosis de calcio a través de verduras, productos lácteos u otras fuentes alimenticias.
Cabe destacar, subrayó Michos, que no hay evidencias de una respuesta a la dosis, lo que significa que la incorporación de más calcio a la dosis diaria recomendada de 1.000 mg en hombres y 1.200 en mujeres de > 51 años no ayuda, especialmente, a la salud de los huesos.
En cuanto a los suplementos, Michos dijo que la actual revisión no termina de convencer, ya que los datos sobre esta cuestión se derivaron, principalmente, de estudios observacionales e investigadores que, sólo, hablaron de la dosis. “Es por esta razón que algunos estudios potencialmente relevantes no fueron incluidos,” dijo Michos, poniendo el estudio EPIC-Heidelberg de 2012 como ejemplo. Tampoco hubo meta análisis ni ensayos aleatorizados ya que estos se consideraron “demasiado heterogéneos,” dijo. “Los ensayos clínicos son nuestra mejor evidencia, no los estudios observacionales.” Esto es cierto, dijo, a pesar del hecho de que los ensayos aleatorizados realizados hasta la fecha no se diseñaron, inicialmente, para poner a prueba los resultados cardiovasculares.
“Pero aunque dijésemos, vale, démosle el beneficio de la duda: los suplementos de calcio no son perjudiciales para la enfermedad cardiovascular,” dijo Michos. “La verdadera pregunta que deberíamos hacernos es si algún beneficio terminará avalando su uso, porque los suplementos tienen efectos secundarios,” tales como hinchazón, estreñimiento y piedras en el riñón. Entre tanto, “el posible beneficio que estos provocarían en la reducción de las fracturas no termina de estar claro,” añadió Michos, que advirtió que los datos de ensayos aleatorizados sobre esta cuestión son “débiles e inconsistentes” e indicó que el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE.UU. asegura que no hay suficientes evidencias como para recomendar ni avalar estos suplementos.
Una Dosis Baja Cumple las Necesidades Diarias
En un editorial que acompaña a los artículos publicados en Annals, las Dras. Karen L. Margolis (Instituto HealthPartners, Minneapolis, MN) y JoAnn E. Manson (Hospital Brigham de Mujeres de Boston, MA), describen la cuestión del riesgo CV y los suplementos como “un área de especial controversia,” una cuestión importante si tenemos en cuenta la cantidad de personas que toman vitaminas que incluyen calcio.
“¿Cómo deberían responder médicos y pacientes a las limitadas e imperfectas evidencias que hay en torno a la relación que existe entre suplementos de calcio y riesgo cardiovascular? Aunque la preponderancia de la evidencia no avala los efectos adversos cardiovasculares, las fuentes de calcio en la dieta se prefieren a los suplementos por otras razones,” como, por ejemplo, piedras en el riñón, coinciden.
La ingesta media diaria de calcio en adultos norteamericanos está en torno a los 700-1.000 mg/día, aseguran Margolis y Manson que concluyen, “pueden utilizarse suplementos para compensar pero no exceder la brecha existente entre la ingesta en dieta y el nivel de ingesta recomendado; no obstante, la mayoría de personas no precisan más de 500 mg de suplemento de calcio para cubrir sus necesidades diarias, siempre y cuando dichas necesidades no se cubran a través de la dieta.”
Caitlin E. Cox is News Editor of TCTMD and Associate Director, Editorial Content at the Cardiovascular Research Foundation. She produces the…
Read Full BioSources
Kopecky SL, Bauer DC, Gulati M, et al. Lack of evidence linking calcium with or without vitamin D supplementation to cardiovascular disease in generally healthy adults: a clinical guideline from the National Osteoporosis Foundation and American Society for Preventive Cardiology. Ann Intern Med. 2016;Epub ahead of print.
Chung M, Tang AM, Fu Z, et al. Calcium intake and cardiovascular disease risk: an updated systematic review and meta-analysis. Ann Intern Med. 2016;Epub ahead of print.
Margolis KL, Manson JE. Calcium supplements and cardiovascular disease risk: what do clinicians and patients need to know? Ann Intern Med. 2016;Epub ahead of print.
Disclosures
- La revisión recibió una subvención de la Fundación Nacional norteamericana de la Osteoporosis. Ni los coautores de la revisión, los editorialistas ni Michos declararon conflicto de interés alguno.
- Wallace dijo haber recibido subvenciones de la Fundación Nacional norteamericana de la Osteoporosis durante la realización del estudio.
Comments